Hola, soy Juanjo, y desde Emprendiendo a Ser acompaño a personas que buscan reconectar con su autenticidad a través de la mirada sistémica y el coaching transformacional. Hoy quiero hablarte de algo que nos condiciona más de lo que imaginamos: las creencias. Esas ideas invisibles que, sin darnos cuenta, dirigen nuestras decisiones, emociones y comportamientos.
¿Qué son realmente las creencias?
Las creencias no son más que pensamientos que, con el tiempo, se han fortalecido. Algunas las generamos a partir de nuestras propias experiencias. Otras, simplemente, las heredamos: de nuestros padres, de la cultura, del entorno social. Lo curioso es que muchas de ellas nunca las cuestionamos… y sin embargo, definen cómo vivimos.
Desde la mirada sistémica, comprendemos que muchas de estas creencias no nos pertenecen realmente. Forman parte de un sistema familiar o cultural más amplio, y aunque en su momento pudieron tener una función, hoy pueden estar limitando nuestro crecimiento.
El inconsciente toma el control
Según la ciencia, solo entre un 3 % y un 5 % de nuestras decisiones se toman de forma consciente. El resto… es territorio del inconsciente. Imagina entonces la fuerza con la que operan esas creencias ocultas que ni siquiera sabes que tienes. A esto se suman hallazgos de la física cuántica que apuntan a la existencia de una conciencia colectiva, una especie de campo unificado donde todos estamos conectados. ¿Te das cuenta de la dimensión de esto?
Creencias, energía y neurociencia
Si nuestros pensamientos son energía, como sugiere la física cuántica, entonces nuestras creencias —especialmente las repetitivas— no solo influyen en nuestro interior, sino que proyectan y configuran la realidad que vivimos.
La neurociencia también respalda esta idea. Donald Hebb explicaba que «las neuronas que se activan juntas, se conectan entre sí», lo que significa que cuanto más repetimos un pensamiento, más fuerte se vuelve su huella en nuestro cerebro.
Bruce Lipton, biólogo celular, fue más allá: demostró que nuestras creencias pueden incluso influir en la expresión genética. Lo que pensamos, sentimos y creemos, literalmente, transforma nuestro cuerpo.
Creencias limitantes: cuando tu mente pone freno sin avisar
Una creencia limitante es aquella que te hace mirar la vida desde una sola ventana, ignorando todas las puertas abiertas. Son frases como:
“Nunca podré con esto.”
“Los hombres no lloran.”
“Tienes que ser perfecto.”
“Para atrás ni para coger impulso.”
¿Te suenan? Yo también he vivido dentro de ellas. Lo importante es aprender a detectarlas.
¿Cómo identificar una creencia limitante?
La pista está en el lenguaje. Presta atención a lo que dices automáticamente. Si te descubres repitiendo ciertas afirmaciones sin cuestionarlas, estás frente a una creencia que merece revisión.
Por ejemplo: alguien que dice “todas las mujeres son malas” probablemente ha tenido experiencias dolorosas. Pero ¿qué pasa si se pregunta: ¿mi madre es mala?, ¿mi hermana lo es? Ese simple cuestionamiento comienza a romper la rigidez de esa creencia.
Cómo transformar una creencia limitante en una aliada
Desde Emprendiendo a Ser, trabajamos con herramientas de coaching y mirada sistémica para ayudarte a reprogramar esas creencias. Aquí tienes un pequeño ejercicio que puedes empezar hoy:
Identifica: ¿Qué creencia te está frenando?
Cuestiónala: ¿Es cierta? ¿Tienes pruebas contrarias?
Sustituye: Crea una nueva creencia que te motive y te represente mejor.
Visualiza: Imagínate viviendo desde esa nueva creencia.
Actúa: Toma decisiones alineadas con esta nueva mirada.
La plasticidad neuronal —como ha demostrado el Dr. Michael Merzenich— nos permite crear nuevos caminos mentales en cualquier momento de la vida. Solo necesitas constancia, apertura y un acompañamiento adecuado.
¿Y ahora qué?
Cuestionar nuestras creencias no es debilidad, es valentía. Es el primer paso para recuperar el timón de nuestra vida. Desde Emprendiendo a Ser, te invito a que explores este camino conmigo, a tu ritmo, desde tu historia. Porque no hay transformación sin consciencia. Y no hay bienestar real sin autenticidad.
¿Estás listo para mirar más allá de lo que creías inamovible?

